jueves, 3 de mayo de 2007

Luminosos días...

En memoria de esos días maravillosos, colmados de pequeños instantes de gloria, cuando quería que el día no acabara para permanecer perdido en tu mirada...
Tu me diste el milagro de recobrar la ilusión, de pensar que podía volver a vivir...
Gracias por tu sonrisa, por tu mirada, por tus pequeños besos, pero sobre todo por tu angel, ese ser que habita en ti y que todo lo ilumina con su presencia...
Quiero recordar de tí esos instantes, esos esfuerzos timidos y ocultos que me decian mucho... esos detalles que solo tu y yo sabiamos y que nos llenaban de felicidad, uniendonos como dos almas en un solo corazón...
Hoy a la distancia, en esta soledad... sintiendo todo este "frio de tu ausencia" se que el error fue mío, al proyectar en ti todos mis deseos y anhelos, sin darme cuenta que tu no sentias lo mismo, y que no podias darme eso que yo te pedía, que para ti era solo una ilusión de niña...
En estos momentos mi alma se apaga como el brillo de las flores que guardo en mis libros, y que sin embargo atesoraré siempre, porque ellas me recuerdan esas mañanas en que tu ibas en bicicleta a buscarlas para mi, esos paseos cotidianos en que yo aparecia en tus recuerdos y tu lo reflejabas en una flor, y esas frias noches de febrero en que tu y yo nos uniamos en un solo corazón mirando la luna...
Cuando el alma se deshace y fluye hacia los ojos es mejor callar... (TMHF)

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